Siempre he sentido una conexión especial con ellos: su energía, su lealtad y su forma de alegrarte el día. Aunque vivo en un piso pequeño y no puedo tener uno propio, decidí dedicar parte de mi tiempo libre a cuidar y pasear perritos como si fueran míos.
Ofrezco paseos llenos de cariño, atención y juego, adaptados al ritmo y necesidades de cada perro. Si buscas a alguien de confianza, comprometida y con verdadera pasión por los animales, estaré encantada de ayudarte.